miércoles, 14 de julio de 2010

Alegato enmascarado a favor de la felicidad.

El otro día leí en el blog de Eduard Punset que “hay más preguntas que no tienen respuesta que preguntas con respuesta” y eso me hizo plantearme que siempre estamos buscando, yo por lo menos lo estoy, respuestas a preguntas que sólo el paso del tiempo pueden responder, son esas preguntas que nos generan desconcierto por no saber cómo se van a desarrollar los acontecimientos o cuándo van a finalizar o empezar, preguntas que nos frustran y hacen que nos sintamos impotentes ante la imposibilidad de conocer su desenlace, son preguntas tan difíciles de responder porque no tienen respuesta inmediata, no obstante, finalmente serán respondidas pero no sabemos cuándo. Pensemos en una operación, una enfermedad o simplemente el plantearnos cuál será el sexo de nuestro bebé, a los cuatro meses lo sabremos. El tiempo nos dirá cuánto tiempo estaremos en el hospital, si saldremos de esa enfermedad o qué pasa cuando morimos....Preguntas de lo más cotidianas a lo más existenciales pero todas ellas con la variable del tiempo azotando nuestro cerebro. Creo que la clave es saber que no porque invirtamos más tiempo en buscar respuestas obtendremos un resultado si no que sucede más bien lo contrario, surgen más preguntas, frustraciones e incapacidad de disfrutar de la vida en ese momento exacto en el que alguna pieza de ese puzzle que es tu vida se ha perdido...asume que se ha perdido, al menos ahora no está, pero siguen estando el resto de piezas que componen tu vida. Puede que tu vida quede un poco desfigurada pero sigue viéndose lo que se esconde tras ese puzzle, sigue estando tu vida esperando a que la vivas pase lo que pase, sólo tienes una, es tuya, te pertenece y tienes que ser capaz de seguir viviéndola en los momentos donde falta esa pieza o donde el puzzle se ha tornado en gris. Tienes, tengo, tenemos que aprender a seguir sonriendo y disfrutando cuando la gente que queremos se marcha, la muerte es parte de la vida; cuando lo que creíamos iba a ser nuestra vida se ha convertido en otra cosa, la vida está en constante movimiento, todo cambia, todo se transforma y tu vida no va a ser menos; cuando caes tienes que levantarte, del suelo no vas a pasar. Vive, aprende a vivir y no busques respuestas donde no las a hay, se feliz.